Según Platón existen dos mundos o órdenes del ser: el mundo sensible, de un lado, y el mundo de las ideas o mundo inteligible, del otro; consiguientemente hay dos principales modos de conocimiento, la doxa u opinión, y la episteme, el conocimiento propiamente dicho o “ciencia”. Todo esto recuerda a Parménides quien también separaba el mundo sensible y la opinión, del ente único, inmutable, inmóvil, cognoscible mediante la razón. Sin embargo, para Parménides se trata de la diferencia entre el ente y el no-ente, de manera que el mundo sensible equivalía a la nada, de la cual no puede haber conocimiento ninguno, sino sólo ignorancia; en tanto que con Platón el problema esta planteado de manera más matizada, en términos menos extremos. En efecto, para Platón el mundo sensible no es para él pura nada, sino que tiene un ser intermedio, imperfecto; pero, de todos modos, algo de ser, no es el verdadero ser, inmutable, permanente, que corresponde a las ideas, sino que se trata de una mezcla de ser y no-ser, y por eso todo allí es imperfecto y está sometido al devenir; y lo que tiene de ser, lo tiene en la medida en que copia o imita -siempre imperfectamente- a las ideas. De manera que entre el ser pleno -las ideas- y el no-ser absoluto, se intercala el mundo del devenir,el de las cosas sensibles,que son y no son, que participan, copian, dependen de las ideas.
Sintéticamente, podríamos trazar el siguiente cuadro de los caracteres respectivos de los dos mundos:
Ideas | Cosas sensibles. |
Únicas (una sola idea de belleza, una sola idea de igualdad, etc.)
Inmutables (no devienen) Idénticas a sí mismas Intemporales Necesarias y universales participadas Modelos Independientes Realidades Perfectas |
Múltiples (muchas cosas bella, etc.)
Mutables (devienen) Contradictorias Temporales Contingentes y particulares Participantes Copias, imitaciones Dependientes Fenómenos Imperfectas
|
Por último podría decirse que las ideas son “trascendentes” respecto al mundo sensible, es decir, que constituyen una realidad que está más allá de este.
Grados del ser y del conocer.
Es necesario precisar las subdivisiones de ambos mundos y su respectivos modos de conocimiento. Ello lo realiza Platón en la República, valiéndose de un segmento,en lo que se conoce como ejemplo o paradigma de la linea, un diagrama o esquema con que se representan las distintas zonas o grados de ser, desde la nada hasta el ser en toda su plenitud, y, paralelamente, los grados de saber, desde la ignorancia hasta el conocimiento absoluto.
Notas y referencias.
Principios de filosofía (Adolfo P. Carpio)
Excelente, como siempre.
Me gustaMe gusta
Gracias oskarmaria, que bueno que te guste, se viene más información interesante.
Me gustaMe gusta
Reblogueó esto en Gerardprieto's Blog.
Me gustaMe gusta
Excelente Gerard, muchísimas gracias, te leo con gusto.
Me gustaMe gusta
Admirable me encanta me hace sentir bien
Me gustaLe gusta a 1 persona